Nunca os habeis parado a pensar las medidas "ocultas" que tienen los hoteles para evitar que la gente como yo se lleve lo que más le gusta?
Recuerdo un viaje a Tenerife que me encantó un jarrón del pasillo de mi hotel.
Mi estrategia?
Pillarlo al vuelo.Casi me disloco el hombro. Ahí aprendí que los adornos pueden estar muy bien pegados al mobiliario.
Como esta lámpara de la mesita...en fin...
Al menos lo intenté!